Sábado, 20 de abril de 2024
 
3 de enero: San Fulgencio de Ruspe, obispo
 
Memoria libre de la Orden
 

[texto del propio de la Orden, para la Liturgia Eucarística y la Liturgia de las Horas]

Datos biografía

Vivió en una de las etapas más críticas de la antigüedad: la caída del Imperio Romano de Occidente y el nacimiento de un nuevo modelo de sociedad. Su fortaleza de espíritu se sobrepuso a las sangrientas persecuciones religiosas del siglo V y supo ser guía de monjes y laicos.

Aunque tuvo las puertas abiertas para ocupar cargos en la administración pública de su tiempo, la lectura de algunas obras de san Agustín influyó en su decisión de elegir la vida monástica. Pensó en una vida humilde y retirada, pero tuvo que aceptar el ministerio sacerdotal y, más tarde, el episcopado de Ruspe, ciudad costera del actual Túnez. Sin embargo, como su maestro Agustín de Hipona, continuó siendo monje y viviendo en comunidad. El mismo año de su ordenación episcopal fue desterrado a la isla de Cerdeña junto con otros obispos. Por su fama de teólogo, fue llamado a la corte real de Cartago, aunque sufrió un nuevo exilio por enfrentarse al arrianismo. En Cagliari fundó un monasterio de monjes y se dedicó a una extensa producción literaria y teológica.

Al morir el rey Trasamundo, su sucesor cambió la política de su relación con la Iglesia y llamó a todos los obispos desterrados. De este modo, Fulgencio regresó a su diócesis de Ruspe donde compaginó la vida intelectual y la participación en varios concilios, con el gobierno y la reforma de su diócesis.

Por la semejanza de algunos capítulos de su vida con la biografía y la admiración expresada por san Agustín, fue llamado en la Edad Media “El Agustín abreviado”. Consideró el pensamiento agustiniano como magisterio seguro y la Familia Agustiniana le considera miembro de pleno derecho. Parece muy probable que el monacato agustiniano llegó a Cerdeña con san Fulgencio de Ruspe.

En el centro de Francia se profesa especial devoción a san Fulgencio de Ruspe ya que, según la tradición, sus restos se veneran en Bourges.